lunes, 14 de octubre de 2013

¿Qué metemos en la maleta para ir a Tailandia?

Algunas de las preguntas más comunes que surgen para ir a Tailandia son:
  • "¿Y la maleta?" 
  • "¿Qué tipo de maleta es mejor?" 
  • "Todo el mundo dice que hace mucho calor, así que... ¿qué meto en la maleta?" 
  • "¿Compraré tanto como dicen y me faltará espacio?"

Por eso hoy hablaremos de...

La maleta y el equipaje



¿Qué tipo de maleta es la mejor?

Una de las principales dudas que tuvimos a la hora de preparar el viaje fue qué tipo de maleta nos llevaríamos. Nosotros íbamos a pasar allí un par de meses, así que, entre lo que nos teníamos que llevar y lo que pensábamos traernos... ¡con eso de los 20 kilos íbamos a tener problemas seguro!

Después de mirar varias opciones y de ver qué nos convenía más, decidimos comprarnos cada uno una maleta de este tipo:



  • Rígida. Buscamos alguna que no pesara demasiado (¡más kilos para compras!) pero que protegiera de los golpes. Al ser de una sola pieza, ¡siempre da más seguridad!
  • No de las grandes, grandes, si no de las de un tamaño más o menos mediano. ¡Así ceñirnos a los 20 kilos sería más fácil! 
  • Con cuatro ruedas, para poder manejarlas mejor.


¿Qué es lo esencial en el equipaje?

Entre que las temperaturas rondan entre los 28-30ºC todo el año y que luego allí acabas llenando la maleta con las cosas que compras, ¡no hay que llevarse mucho! Todo ropa y calzado de verano. 

Eso sí...

¡ATENCIÓN!

Hay que tener en cuenta ciertas cosas:

Templos
Para ciertos templos, las mujeres tenemos que ir tapadas hasta los tobillos y no podemos enseñar los hombros. Lo que quiere decir pantalones largos o faldas largas y camisetas que no sean de tirantes. Para otros templos, tanto los hombres como las mujeres tienen que ir tapados hasta los tobillos y, otra vez, nada de enseñar los hombros.

Del mismo modo, ¡no nos olvidemos de un calzado cómodo! ¡Algo que sea fácil de quitar y de poner! En muchos templos hay que descalzarse antes de entrar, así que eso de ponerse y quitarse los zapatos cada dos por tres puede acabar con nuestra paciencia si llevamos sandalias complicadas o zapatillas de deporte con cordones.

Selva
Para las zonas de selva es recomendable llevar pantalones largos (para evitar bichos y picaduras de mosquito o cualquier tipo de picadura) y calzado adecuado.

Época de lluvias
También tendríamos que tener en cuenta si vamos en época de lluvia para llevarnos el calzado y la ropa más apropiados. ¡Sin olvidarnos del chubasquero y paraguas, claro!


Resumiendo...

Lo esencial en la maleta es...
  • Ropa y calzado de verano | ¡Pero tampoco demasiado que luego se compra bastante!
  • Ropa y calzado adecuados para los templos y las excursiones que incluyan selva | 
  • Bikinis/Bañadores | 
  • Sombreros/Gorras | 
  • Gafas de sol |
  • Protector solar | ¡Recordad que allí el concepto de protector solar es diferente! Allí casi todos los protectores solares tienen un efecto "blanqueante". La moda en Tailandia es tener la piel más blanca, ¡mientras que nosotros lo que queremos es ponernos morenos! Si queremos comprar allí un protector solar como los que tenemos en Occidente, nos saldrá a precio de extranjero, es decir, muy caro. ¡Que no se te olvide!
  • "Kit de primeros auxilios" | En esta entrada hablamos de los aspectos médicos que tendríamos que tener en cuenta a la hora de preparar el viaje a Tailandia.

¿Y EL EQUIPAJE DE MANO?

Lo esencial en el equipaje de mano y/o bolso es...

El viaje en avión (de un mínimo de 12 horas, según la compañía y las escalas) se puede hacer muy pesado. ¡Asegúrate de que te llevas cosas que te ayuden a no aburrirte/desesperarte! Si bien es cierto que te dan prensa al llegar y que cada asiento tiene una pantalla en la que puedes ver películas, oír música, jugar a videojuegos... 12 horas son muchas horas. Además, muchas de las películas están en otros idiomas y sin subtítulos en español, ¡así que es bastante fácil ver todas las que nos interesan de una sentada y quedarnos sin nada más que hacer! ¡Y acuérdate de que a la vuelta son otras tantas horas! Así que lo esencial, en este caso, ¡depende de cada uno! Eso sí, ¡que no pase de los 7 kilos!


¡Si tenéis alguna duda no olvidéis de que podéis comentar abajo o en nuestro grupo de Facebook!



¡Hasta la próxima!
La Gon!

viernes, 4 de octubre de 2013

11 días. Segunda parte: Phuket

Día 4 | Phuket

Nos levantamos pronto porque teníamos el vuelo sobre las 11 y no sabíamos cuánto se tardaba en llegar al aeropuerto Don Muang en taxi. Así que, ¡más valía prevenir que curar! De todas maneras, de nada sirvió porque al final el vuelo acabó saliendo con casi tres horas de retraso. Entre llegar a Phuket, el taxi a la playa de Kata (que tarda una hora) y el encontrar el hotel, llegamos a las cinco de la tarde cuando tendríamos que haber llegado para comer. ¡Cosas de la vida! Al menos llegamos justos para cenar algo e ir a la playa a ver la puesta de sol. ¡Eso sí que mereció la pena!

Una vez anocheció, volvimos al hotel, nos cambiamos de ropa y salimos a dar una vuelta por Kata. ¡Para lo pequeño que es tiene un montón de sitios y se pueden hacer mil cosas!

Después de cenar nos fuimos pronto a la cama ¡porque al día siguiente queríamos madrugar!



1| Vista de Phuket desde el avión.
2| Dino Bar. Un bar ambientado en la Edad de Piedra. ¡Todo como en Los Picapiedra!
3| Atardecer en la playa de Kata.


Día 5 | Phuket

¡Nos levantamos a las 6 de la mañana para ver el amanecer desde la playa! Si vas a Phuket y te apetece madrugar, te lo recomiendo. ¡Es una experiencia única!

Después, sobre las 7, nos volvimos al hotel a dormir unas horitas más.

Sobre las 9 ya estábamos en pie y fuimos a alquilar unas motos para el resto del día. No son gran cosa, pero ¡son bastante baratas y te dan muchísima libertad! Cruzamos la isla y fuimos a la playa de Rawai, después seguimos conduciendo hasta Laem Phromthep (que es el cabo más al sur de Phuket), la playa de Ya Nui.

Después de Ya Nui decidimos ir a ver el Big Buddha, que es un Buda enorme encima de una montaña. Puede parecer fácil llegar hasta él, incluso que se va a tardar poco, pero no. ¡Llegar es toda una aventura! Los carteles no son nada precisos y, de repente, te ves subiendo la montaña con la moto, por caminos y cuestas de tierra ¡en los que parece que la moto no da más de sí y que vas a tener que desistir y dar media vuelta! Mientras tanto ves a tu alrededor a un montón de elefantes haciendo las rutas de elephant trekking... "Como vengan hacia mí, ¡la moto esta no me salva!"... Pero sigues y sigues, y al final llegas. El Big Buddha es impresionante, pero no nos engañemos, ¡que es una decepción darte cuenta de que lo empezaron a construir en 2007 y que todavía no han terminado el complejo que tienen pensado hacer! Aún así, visitamos el templo y nos encontramos con un monje que daba bendiciones de protección. ¡Y de cabeza que fuimos! Mientras te ataba una pulsera en la muñeca, rezaba una bendición budista y te tocaba la pulsera, la cabeza y los hombros con una especie de ramas mojadas en agua sagrada. Le pedimos que nos bendijera unas cuantas pulseras más para llevarle a la familia. ¡Es de esas cosas que luego quiere todo el mundo!

Justo después, empezó a llover torrencialmente y nos quedamos allí un rato más, porque volver por esas cuestas con las motos y la carretera mojada no era una buena idea. Aunque la lluvia era fuerte, no tardó mucho en amainar y ¡el sol volvió en un abrir y cerrar de ojos! (Por no hablar de lo rápido que se evaporó el agua de la carretera...). Una vez nos pusimos en camino otra vez, volvimos a la zona de Kata. Pasamos un rato en Kata Noi (Kata pequeña) y después volvimos al hotel. Compramos los billetes de barco a Koh Phi Phi para la mañana siguiente y, como nos quedaban un par de horas para devolver la motos, ¡nos fuimos a investigar un poco más la zona! Llegamos hasta Karon y allí encontramos un mercadillo nocturno en el que había bastantes buenos precios. Compramos un par de cosas y volvimos a Kata. Devolvimos las motos y nos pusimos a buscar un sitio para cenar. Como no nos poníamos de acuerdo, ¡decidimos darle una oportunidad al Dino Bar!

Al día siguiente tocaba madrugar otra vez, pero esta vez nos esperaba ¡Koh Phi Phi!






1| Amanecer en Kata. Aunque el amanecer es en realidad por el otro lado de la isla, ¡merece la pena! ¡Además con compañía!
2| Big Buddha.
3| Vista desde Laem Phromthep.
4| Atardecer en Kata Noi.



¡Nos vemos pronto!
La Gon!